La becada es un ave que habita en los bosques, que pasa
buena parte del día oculta, y que aprovecha la noche para salir a alimentarse a
los humedales: lombrices, insectos... En sus migraciones invernales desde el
centro y norte de Europa a zonas más cálidas del sur, no rebasa el Sahara. Se
comienza a detectar su paso por la
Península a finales de octubre y hasta la segunda mitad de
diciembre. Sin embargo, su orientación no es infalible, y eso quedó demostrado
este lunes en Pamplona.
El reloj marcaba las 18.45 horas cuando una de estas aves, que presentan un
tamaño medio de 30-35 cm
y un peso de 300-350
gramos, se estampó contra el escaparate de una
autoescuela de la calle Iturrama. Desorientada, acabó en el rellano del centro
de estética anexo (nº13) que regenta Isabel Lizarazu. Optaron aquí por cerrar
la puerta del establecimiento y bajar la verja exterior, encerrando así a la
becada. Tras llamar al 112, personal especializado pasó a recogerlo,
reconociendo que era "algo inusual".
El ornitólogo de Gorosti Juan Ignacio Deán coincide: "Es raro que una
becada se desoriente, pero pasa. Vuelan sueltas o en grupos laxos. Pueden
perder las referencias con tormentas, nubes o las luces o elementos de la
ciudad. Decenas de aves chocan al año contra las acristaladas paredes de la Audiencia o los
Edificios Inteligentes".
Fuente: "Diario de Navarra" del 16 Noviembre 2.011
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